miércoles, 18 de junio de 2008
Braseros portátiles.
Navalón:
"Se me habían olvidado ya los rigores de los fríos, cuando los pinganillos colgaban de los aleros del tejado, cuando llevábamos a la escuela una lata llena de brasas, atada con un alambre que íbamos volteando por el camino. Han desaparecido los sabañones y el clima se ha suavizado tanto que en el pasado diciembre han florecido las escobas de las laderas como si estuviéramos en el mes de abril. Pero llegó enero [...][y en estos] días de perro invierno, cuando trato de poner en orden los abandonos de 'El Berrocal', he vuelto a tener que recoger leña para hacer una lumbre de urgencia en medio del campo para que no se quedaran helados los pies. Ya ni me acordaba de los crudos inviernos cuando había que ir con una marra a partir el carámbano de las charcas para que pudiera beber el ganado, o cuando tratas de levantar las piedras de un portillo y no las puedes mover porque los hielos las tienen pegadas al suelo. El último día de enero ha sido un martirio de tiritonas y cuando llegábamos a casa echábamos una enorme brazada de escobas y leña menuda para que la gran llamarada de la lumbre nos devolviera el tempero a los cuerpos. Cuando ya casi llegaba la media noche, con las camas llenas de botellas de agua caliente sonó la llamada de [...] Chago Corvo desde La Fregeneda en uno de esos arranques de nostalgia, al cabo de tantos años sin vernos. Le prometo ir a verlo en cuanto temple el tiempo. Hacemos un largo repaso de las aventuras pasadas [...]. De los quintos del pueblo sólo quedamos tres, ¡qué poquitos años nos quedan Chaguito! ¡Disfrútalos!."
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3 comentarios:
Juntando todos los artículos que escribió Navalón sobre la vida en general (ver, p. ej.: www.alfonsonavalon.com)se podrían hacer varios buenísimos libros de Sociología (y tal vez pasara como con los de "El Lute", que se valoran más en Alemania que aquí). En algunas cosas estaba un poco "chapado a la antigua", pero sería mucho pedir que a cierta edad cambie la gente ciertas cosas que le metieron en el inconsciente de pequeños "a macha-martillo".
Hace justamente una semana (do. 29-jun.-08), mientras casi todos los españoles y alemanes estaban intentando dirigir con sus miradas la trayectoria de un objeto redondo, nos encontrábamos mi mejor amiga (Merce) y yo charlando a la orilla del río y a la sombra de un arbolito (y sentados sobre "El País"): a los 2 se nos avecinan ciertos cambios (a ella sobre todo).
Le decía yo que a ver si un día íbamos a su tierra para ver de cerca y hacer fotos de "El Berrocal", que me hace "ilu". Y contaba ella cosas de Navalón que no aparecen en sus escritos; y eso que parece que no puede dar más de sí una vida que todo lo que él escribió.
Ahora seguramente no debatiremos (sencillísimo debate) si "lagarteros" ellos o nosotros (ambos nos sentiremos "lagarteros").
"El País", 22-agosto-08:
"José Alonso [...] y Amalia Filloy [...] salieron con sus dos hijas (Amalia, de 15 años, y María, de 11) el miércoles a las 5.30 horas desde La Fregeneda para coger el avión en Madrid [...].
Cuando, tras el brutal choque contra el suelo, el bombero Francisco Martínez entró en el avión, encontró heridas [...] a Amalia y a su hija menor. Fue a coger a la mujer, que parecía estar peor, pero ella se negó. "Me pidió que rescatara primero a su hija", contaba ayer [...] el bombero en la puerta del hospital La Paz, donde había ido a preguntar por el estado de la niña. Martínez narró algunos detalles de su rescate a los medios que [...] esperaban [...] la llegada de Zapatero". (V.G.C./Á. DE C.) (Creo haber leído que no lo dejaron entrar por no ser familiar).
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